domingo, 3 de mayo de 2015

                 
     CANDIDATO AL AYUNTAMIENTO


Dimensiones: 2.40 x 2.00

Inmenso, infinito, genial..., así es el Cuadro. Y, ¡lo que son las cosas!, retrata, precisamente, a un personaje  nada ambicioso… A partir de ahora habrá que ir de vez en cuando a Convalecencia, aunque sólo sea para contemplar al Rector del Cuadro. No en vano es de cuerpo entero: mide 2.40 x 2.00; es decir, tan grande como la gestión del personaje. 

Ya estuvo expuesto en el Museo de la Universidad, pero muchos estuvimos impacientes, esperando que lo colgasen en un lugar más digno. Una nueva ruta de peregrinaje se abre para viajeros, bohemios y adictos al análisis no tanto de las obras de arte, sino de los personajes inmortalizados en ellas ¿Es posible viajar a París y no ver la Gioconda? Creo que no me equivoco al afirmar, que en adelante será prácticamente imposible visitar la Universidad sin ver el Cuadro

¡Míralo, y dime qué ves! Se agolparán en tu mente imágenes sin cuento, referidas a la gestión económica, creación de nuevas plazas, promoción presurosa de los más fieles…, como nunca había ocurrido hasta entonces. Todos somos deudores, de quien pasó por estos sotos con presura, y yéndolos mirando, vestidos los dejó...
Alguien, -muy listo él-, graduado en Harvard, me habla del tamaño de los demás cuadros, ahora en situación de inferioridad; de la gestión de otros rectores que también hicieron aportaciones inestimables..., pero no hay color. Rector con mayúscula sólo hay uno en esta Galería, para enojo de politeístas. 

Miro de nuevo el Cuadro y sonrío casi sin darme cuenta, casi alegre, algo aliviado. Y mi sonrisa me acerca más a los cientos de universitarios bienintencionados, capaces de apreciar lo grande. 

Perdimos un rector como se pierde un pájaro, pero  apareció  de pronto un político enorme,  Candidato a Alcalde por el PP. Provisto de la producción cientifica obtenida mientras era Consejero, viene  dispuesto a dejar la Ciudad como la Universidad, es decir limpia como una patena.

Estamos muy cerca  de que el Hombre del Cuadro  pueda administrar otra vez vidas y haciendas.  Y, c0mo queda dicho, su  habilidad para engrosar las arcas públicas,  es enorme.

Post Data: F.R.C., profesor de Universidad y estudioso del lenguaje no verbal, ha contemplado el Cuadro  que hemos  reproducido en el Blog.  Y escribe lo siguiente:


Lo más enigmático del retrato es la cara, sobre todo la mirada. Este hombre solo ve con un solo ojo, el derecho. Su ojo izquierdo está sin vida, apagado, uno podría pensar que es tuerto.
El color de la cara nos invita a pensar que es amigo de cofradías y sociedades secretas, un gran vividor que busca en el poder dar rienda suelta a sus impulsos. Tal vez, en otro tiempo, le hubiera gustado ser virrey o príncipe de la iglesia…