martes, 20 de diciembre de 2016




LA UNIVERSIDAD SE DEBILITA 

Como profesor de la Universidad Pública durante más de tres décadas, he comprobado cómo, cada vez más, se impone la ley no escrita de la sumisión, y son muchos los que callan porque temen las consecuencias de su discrepancia.
 
¿Debe decir uno lo que piensa en la Universidad? Por propia definición es el lugar de la libertad y de la universalidad de las ideas. Hacer universidad es algo más que conceder títulos. Es sobre todo aprender a pensar, considerar casi todo desde perspectivas múltiples, poder escapar de las prisiones ideológicas… Pero aquí y ahora la pasividad de la universidad es inquietante.

Hace varios años que algunos profesores, intentamos cambiar algo en la "Escuela de Mandarines", pero esta institución, se resiste a la reforma. Si, a pesar de todo, insistes, te mandarán "la santa inquisición” para que te calles.

La Universidad Pública Española se debilita y languidece, a manos de un Gobierno enemigo de la Ciencia.