viernes, 23 de noviembre de 2012


FIN DEL MUNDO

Según los indios mayas, el fin del mundo tendrá lugar este año  2012. Me cuesta creerlo, pero bien pudiera ser cierto. En España al menos, con toda seguridad, será el fin del mundo. Hay signos que anuncian este prodigioso porvenir. 

Tenemos unos Jefes fantasiosos. Prometían llevarnos a la tierra de promisión, pero vamos de culo rumbo al abismo. Cada día reducen  las funciones y el poder redistributivo del Estado, revocando importantes aspectos del bienestar. Es el fin del mundo; de este mundo que con tanto esfuerzo hemos venido construyendo durante varias décadas. Los mayas tienen razón. 

Nunca he podido soportar el odio, y sin embargo veo con simpatía las reacciones de algunas personas, que empiezan a tomarse la justica por su mano. Mientras tanto, banqueros y políticos proclaman a coro: “Estamos en el buen camino”. Y sin ningún pudor hacen alarde de una ideología que declara al mercado como superior al Estado. Las decisiones de los Viernes en la Moncloa producen tal desencanto, que explican las reacciones de  aquellos a quienes  se les niega las condiciones de existencia.

Durante los meses de “ocupación alemana” (sic) en España, sólo se habla de hospitales,  desahucios,  paro,  deterioro de la educación, colonialismo, suicidio..

Creo, como los mayas, que se acerca el fin del mundo. Pero espero que sea el fin del mundo de los banqueros, de los partidos con mayoría absoluta, de la ocupación alemana, del golpe de estado encubierto.

Para ello, sólo hace falta ejercer la oposición de otra forma, experimentando que los «problemas sociales» se pueden abordar de otra manera, y que no todo debe estar dominado por las ideologías y la política