Murcia ha sido hoy noticia nacional e internacional, gracias
a la universidad privada: UCAM. Aunque no estoy del todo seguro
si es privada, porque recibe las dádivas y el óbolo de las
instituciones públicas de esta Región. Más privada me parece la UMU, a juzgar por los procedimientos utilizados en algunos
departamentos a la hora de dotarse de recursos humanos. Mi amigo Gerardo Landrove, llega incluso a
afirmar que la UMU
es la universidad más privada de las privadas. No sé si exagera este prestigioso profesor de Derecho. Pero lo que
sí es cierto es que en nuestra universidad pasan de padres a hijos, de
mandatarios a súbditos y de padrinos a ahijados, las influencias, las plazas y
hasta los cargos.
Señor
Candidato, escúcheme usted:
¿Qué piensa hacer con el nombramiento y
contratación del profesorado? La selección del profesorado, sigue haciéndose de
manera perversa, basta observar la situación de los profesores
asociados. Usted mismo me informa de algunos “chanchullos”. Y, ¿por qué me lo
dice a mí y no lo denuncia, con la autoridad que le da el ser candidato?
Ya sé, ya sé…, lo hace porque piensa que
tendrá más eco, -se equivoca-, si yo lo pongo en el Blog, lo digo en la intervención semanal que tengo
en la Radio, o en una columna de opinión en El Mundo. Pero de estas cosas sólo
hablo en el Campus, porque después de treinta
y cinco años de vida universitaria, le tengo querencia (a la UMU, ¡qué cosas!)
Sí he hablado, y mucho, del “malestar de una institución”, que afecta especialmente a los
profesores, pero también a los alumnos, y al personal de administración y
servicios. Me refiero a la universidad invisible, que algunos pretenden que
siga existiendo además de la visible, como se pretendió en el pasado que
existieran dos Españas. El heterodoxo profesor Ramos de Salamanca, pero al
mismo tiempo uno de los más lúcidos con que cuenta la universidad española, me
envía este mensaje: “la universidad invisible la sufrieron Cajal, Unamuno, Ortega y
Marañón, y miles de alumnos hoy día la odian sin nombrarla”. Tal vez
exagere, como también exageraba Emilio Lledó:
“no es posible una democracia sin educación”…, “sin Paideia” toda democracia es una parodia que se
convierte en oligarquía democrática, pseudodemocracia poligárquica”...
Señor Candidato, dígame usted: ¿Pública o
Privada?
Post
Data: Si después de este
largo proceso electoral, la UMU es gobernada por mediocres, -no vale fijarse
sólo en el aspirante a rector, sino sobre todo en los miembros del equipo-, le
prometo, señor candidato, que pediré “la baja”, y/o la “jubilación anticipada”.